Selección de software

Las actividades de un Centro Informático pueden estar organizadas de diversas formas.

Con independencia de los nombres que reciban en cada lugar en particular, los principales puntos neurálgicos van desde el lugar donde se construyen o se manda a construir Sistemas (Área de Desarrollo) hasta la gente que tiene las duras responsabilidades de las actividades diarias de Producción (también conocida como Explotación de Sistemas).

En el intermedio y al lado de estas dos grandes unidades existen múltiples unidades que cumplen numerosas tareas tanto de filtrado de aplicaciones (Control de Calidad) como tareas para asegurar la continuidad de las operaciones e incorporar nuevas herramientas (Ingeniería de Sistemas).

Una característica específica de estas actividades es que no se pueden detener.

Nadie podría pretender reorganizar este mundo partiendo desde cero.

Para esto, es importante saber examinar el escenario con perspectiva y siempre planificando con precisión el nuevo escenario al cual se quiere llegar.

Escoger un programa o software básico puede ser muy importante y puede significar que la nueva situación engendre nuevos problemas.

A menudo también vemos que cuando una instalación cuenta con un Software básico determinado, que hace invisible un problema que soluciona, le resulta muy difícil planificar prescindiendo de ese producto en particular, aunque podría ser lo mejor.

Frente a esto, existen metodologías de análisis y planificación, así como las necesarias mediciones cuantitativas, que permiten elaborar criterios de selección de software, según el grado de madurez de la informática en la organización.